Situación Humillante (clásica en mi pubertad)

Ubíquense en mi hace unos años, cuando me encantaba, vivía y moría por Tavo, cuando los Backstreet Boys no eran un evento muy lejano, cuando una perforación eran palabras mayores..

Ya? Bueno..la cosa empieza así...

Yo acababa de llegar de viaje y entre otras cosas había comprado dos pijamas totalmente contrarias. La de weva que consistía en boxers de corazones y blusita y la elegantiosa que era de esas pijamas que se ponia la tipa de Clueless. Me iba a dormir y estaban las dos pijamas a mi disposición, rechinando de nuevas, listas para estrenarse. Escojo una y me voy a dormir.

Terminando de desayunar mis papás se van y me quedo sola en la casa con mi hermanita. Tocan la puerta y se asoma, me dice que yo valla así que salgo y entro con la misma. Tavo afuera, tocando el timbre, sin aviso previo, sin razón alguna, Tavo en mi puerta!

¿Adivinen que pijama escogí la noche anterior?

Obvio! la de weva, la no elegantiosa, la de corazones.. Le ruego a la pinche mocosa que salga a abrir en lo que me enrollo una sabana o me pongo un costal pero se niega, es una cabrona. Con la pena..salgo y le digo que pase..le abro la puerta, lo saludo y le digo que me espere en lo que me cambio.

En mi cuarto por poco vomito a mi hermana, me pongo lo primero que encuentro y heme ahí, empapada en humillación, saliendo a saludar al ser humano que más me movía el tapete, dando por terminada la posibilidad de que el me viera como algo mas que un moco de 14 años.

¿El? como si nada, hasta la fecha no se (ni sabre porque no se acuerda) si noto mi cara de frustración y trauma y se hizo menso o si realmente no noto lo increíblemente ridícula que era mi pijama.

Tavo..que pinche eras! Pero ahora hasta en camiseta de Comex te recibiría con tal de que me visitaras..hijueputa..