Ayer en la noche, después de quejarme públicamente por mi desorganización y mi enfermedad, me encontré con mi mejor amiga (FE&E) de la secundaria.
Estábamos perdidísimas, tenía como un mes que no sabía nada de ella.. chatear es lo único que nos queda, ver las fotos en facebook.. hasta ahí. Ella vive del otro pinche lado de la república.
Inevitablemente empezamos a recordar nuestros años pubertos, lo sumamente libres que nos sentíamos con un poquito que nos soltaran la rienda, cómo todo nos valía madres y todo se nos resbalaba, lo simples que eran los dramas y lo felices que fuimos.
Me cayó la década encima... así, cabronsísimo. Me empezó a dar mi ataque de "no quiero crecer y quiero ser mantenida foreveada", casi tan pinche como el que me dio cuando cumplí 20. Crisis existencial, blah blah blah..
Hoy en la tarde, mientras hacía tiempo para ir por mi hermana a un asunto en el centro, me puse a caminar. Tenía bastante tiempo que no tenía tiempo, precisamente, de caminar sin norte ni sur... nomas por el puro placer de caminar. De hecho, no tenía, pero las circunstancias se dieron y ahora el desvelo valió la pena, en fin...
Encontré en alguna calle perdida una puerta de cristal, de esas que no te dejan ver hacia adentro... ¿cómo se llaman? No las que reflejan, las otras, como de casa de abuelitos. Bueno, una puerta grande, y sobre ella, un balcón increíble. Era un departamento, a la vista, pequeño... pero de esos que tienen "alguito" que te hace voltear. No lujo, ni estilo... otra cosa.
Colgado de la reja del balcón, un anuncio de "Se Renta" en rojo, un número de teléfono y uno de celular.
"Está chido.."
Y seguí caminando, tres, cuatro, cinco... ¿seis pasos? Di la vuelta sobre un pie y regresé hasta quedar enfrente del departamento. Crucé la calle y traté de asomarme en la puerta. Ahá, no vi nada, obvio... pero lo quedé viendo desde afuera un rato, sin poder moverme de ahí.
"Si, ¿bueno? emm.. buenas tardes, llamo por el departamento que rentan sobre la calle... si, ese. Un cuarto, un baño.. ok. Si, no importa, yo vivo sola... Ah, ¿son dos depas? Bueno, yo estaría interesada en la planta alta, no, no me importa que no tenga patio. ¿Mil pesos? ¿Lo podría ver ahora? Si, estoy enfrente... ah bien, no, no se preocupe, podría venir a verlo el fin de semana. Yo me comunico con usted para ponernos de acuerdo. Muchas gracias, hasta luego"
Suspiré mientras me dejaba caer contra la puerta.
No, no estoy buscando depa. Justo ahora vivo en un lugar que, finalmente, llegué a sentir como "
hogar", además de vivir felizmente con mi hermana, al fin, después de tanto tiempo separadas.
La verdad, no se por qué llamé. Sentí la necesidad de hacerlo, y me vi, les juro que me vi, bastantes años más tarde en un micro-departamento en el centro, cortando el cordón umbilical, finalmente.
Una cosa por la otra, ya me llegará el día...